Final de agosto. Fiesta mayor en mi ciudad. Últimos coletazos de estas maravillosas vacaciones con mi familia.
El lunes retomaremos la rutina, pero atrás dejamos grandes momentos de risas, de amor, de felicidad... Estos momentos ya forman parte de nuestra vida, son nuestro tesoro más preciado. Ahora toca vivir otros instantes, quizás menos intensos, pero que también llenaran nuestro increíble cofre del tesoro de los recuerdos.
Y para empezar el nuevo curso, os dejo con una receta que nos ha acompañado en algunos encuentros veraniegos. Una receta que me encanta por su frescor, su exotismo y, como no, porque es sanísima. Además, es muy versátil porque puedes poner de todo tipo de verduras, hortalizas, frutas... una receta ideal para dar un final feliz a aquellos restos que tenemos y no sabemos que hacer con ellos.
He tenido la posibilidad de hacer el taboulé con bulgur (siempre lo había hecho con cuscús o quinoa). El auténtico bulgur es trigo germinado y partido. Me ha encantado! Es tan rico a nivel organoléptico como nutricional. Os animáis?
INGREDIENTES:
150 gr de bulgur *
Agua (según indicaciones, yo puse 375 ml)
2 zanahorias *
1 tomate *
1 pepino *
1 pimiento verde *
1 cebolleta *
1 manzana *
2 limones *
Hojas de menta (al gusto, yo pongo unas 10 hermosas) *
Aceite de oliva virgen extra y sal.
* Productos ecológicos
Cocer el bulgur según indicaciones (yo herví el bulgur junto con el agua y un poco de sal durante 6 minutos y lo dejé reposar todo tapado 10 minutos más). Añadir un poco de aceite y mezclar bien. Reservar.
Picar las verduras/frutas/menta (menos el limón) en pequeños cubos.
Mezclar los cubitos con el bulgur, junto con el zumo de los 2 limones. Meter en la nevera y servir bien fresco.
SALUT!