Como buenos catalanes que somos, nos encanta el “pa amb tomàquet” (pan con tomate). Una vez a la semana es nuestra cena: un buen pan casero, unos tomates ecológicos, un chorro de aceite de oliva virgen extra y unos buenos embutidos artesanales… es una delicia!!! Para ir variando, vamos cambiando el tipo de pan, aunque la hogaza siempre es tipo pan de pueblo (nosotros la llamamos pa de pagés).
Una amiga tuvo el detallazo de regalarme un saco de harina integral de espelta ecológica (Gracias de nuevo Imma). Y voy dándole salida… mmmmm… qué sacrificio!!! Jajajaja
Así que este pan de pueblo lo he hecho con una mezcla de harina de fuerza y harina de espelta. Lo único diferente (y que se va a convertir en lo normal) es que hice una biga el día anterior. Una biga es un prefermento que hace que el pan tenga un sabor más natural, más acentuado. No es más que una mezcla de harina y agua que se guarda en la nevera y que se mezcla con la masa cuando queremos hacer el pan… parece simple, y lo es, pero el resultado es espectacular!!! Y más cuando hacemos pan sin masa madre (es mi asignatura pendiente… tenemos una relación de amor / odio… pero eso ya es otro cantar!!!).
El pa amb tomàquet quedó buenísimo… como también quedó de bueno el pan con mantequilla y mermelada de moras casera a la hora del desayuno… Y es que este pan puede durar más de 48 horas perfectamente (como los panes de súper, verdad?).
Ingredientes:
Para la biga:
100 gr de harina integral de espelta ecológica
70 ml de agua
1 gr de levadura fresca
Para la masa:
La biga
300 gr de harina de fuerza
100 gr de harina integral de espelta ecológica
270 ml de agua
10 gr de sal
10 gr de azúcar
9 gr de levadura fresca
Hacer la biga el día anterior. Dejar, tapada con film transparente, en el frigorífico.
Mezclar todos los ingredientes y amasar hasta conseguir una masa elástica, pringosa pero no pegajosa. Normalmente, unos 10 minutos son suficientes. Dejar reposar tapado con un paño húmedo durante una hora o hasta que doble el tamaño.
Desgasificar (amasar) y dar forma. Dejar reposar sobre papel vegetal en la bandeja del horno y tapar con el paño húmedo durante una hora o hasta que doble el tamaño.
Precalentar el horno a 240º. Greñar el pan (hacerle cortes con un cuchillo afilado) y ponerle un poco de harina para dar más efecto rústico.
Meter al horno 10 minutos. Yo voy pulverizando agua cada 3 minutos para conseguir una corteza crujiente. Bajar la temperatura a 200º 15 minutos más (sin pulverizar más agua). Volver a bajar la temperatura a 180º y dejar 30 minutos más.
Dejar enfriar sobre una rejilla.
SALUT!
No conocía la biga!!! Qué idea más buena me has dado para el pan de este fin de semana! ^__^
ResponderEliminarPor cierto! Cuando vayamos allí ... me llevarás dónde compras los embutidos artesanos?? Quiero llevarme un trocito de Catalunya a Madrid!! ^__^
Pruebala!!! Ya veras como se nota un monton!!!
ResponderEliminarEspero que ese finde haya fireta de productos artesanales... sino ya te llevare de excursion!!! jejejeje
Halaaaa¡¡¡¡ Que hambre me ha entrado a estas horas viendo esa rebanada de pan con tomate. Y tu receta me viene genial. Nosotros ya hemos conseguido hacer nuestro primer pan de masa madre, y salió bastante bien. Y Javi quiere hacer el siguiente de espelta integral, así que tomaré prestada tu receta. Un abrazo.
ResponderEliminarJoooooooo!!!!!! yo también quiero una amiga que me regale un saco de harina de espelta.. Yo suelo comprar el grano.. lo muelo en la TH --- si si ya sé que no es lo mejor --- pero el pan me sale igual de bueno. Me copio tu receta... y... a mí también me gusta el pa amb tomaquet como buena catalana. ;) jijijijj
ResponderEliminar